El libro llego a mis manos ayer por la mañana, y a las cinco de la tarde le ponía fin, 430 páginas de vértigo que no me dejaron ni respirar. Lo primero que me enloqueció fue la portada, una imagen abrumadora del fotógrafo Mika Suutari,  y en cuanto entré en el texto fui víctima de la mente de Vilaseca  , a quien ya he metido en el cajón de los "robatiempo". La historia esta contada en primera persona, por lo que en dos páginas, ya estas metido en la piel del protagonista, y nadie te avisa de lo que se te viene encima.  El protagonista es un médico, que vive en Valencia, acaba de volver de una misión humanitaria en África y no acaba de encontrarse bien, sea porque el señor es un poco fresquito y a visitado lechos africanos poco limpios, o por alguna gripe de ves tu a saber que cepa, la cuestión es que esta malísimo y pide asistencia a un colega de profesión, que lo atiende como puede y lo manda a dormir. El hombre se despierta y no sabe ni en que día esta, enciende el televisor y no hay emisión, en el teléfono no hay señal, y cuando sale a la calle...hasta aquí os cuento que el resto es todo Espoiler y no quiero que nadie pierda la oportunidad de descubrirlo y sufrir como lo hice yo ayer.

He de admitir que este libro no lo hubiese leído de no ser porque Sicilia lo puso en mis manos,  pero esa es la parte maravillosa de aceptar recomendaciones literarias, así que gracias Sisi.

José Vilaseca, a sus 40 años, es el autor de algunos otros pelotazos a los que en breve echare mano, pero por lo pronto os recomiendo este, lo recomiendo muchísimo, lo podéis encontrar en las librerías de Valencia Soriano y Paris Valencia, y también poniéndoos en contacto con Edisi vía mail en info@edisi.es

Lectores, tiraos a la piscina de Tierra Muda, nunca disfrutareis tanto del fin del mundo, y editores del mundo, seguid el ejemplo de Sicilia y poned vuestros libros en mis manos, yo prometo ser buena.

Esto es todo hasta el próximo #delibros , no olvidéis comentar que os ha parecido el post,  el libro, cuando lo leáis, y todo lo que queráis, y leed , que cualquier día te despiertas y...